El fin de semana pasado lo pasamos bastante tranquilo debido al tiempo en Madrid, que si llueve que si no, igual que éste vamos. El pequeño caballero feliz, donde le llevamos le parece bien. Terminando ya el domingo su baño, su cena, bibe y a dormir, no notamos nada raro, así cuál es nuestra sorpresa cuando a las dos o tres horas de dormir empieza a toser con una tos muy muy fea, y así el pobre toda la noche.
El lunes me lo tuve que llevar a la escuela sin remedio, ya que nuestras familias están o viven fuera, y siguió con esa tos perruna tan fea, además de estar cansado y decaído. Se me caía el alma de verle así.
A medio día le llevamos a urgencias, a su pediatra y el diagnóstico fue Laringitis. Nos dio las indicaciones precisas y el medicamento en cuestión.
Seguramente muchos papis hayáis vivido una situación así, es una enfermendad muy común en los niños, pero que hay que tratar y cuidar.
¿Qué es la laringitis? La Sociedad Española de Urgencias de Pediatría A.E.P. la define como, «una inflamación de la laringe producida, generalmente, por una infección vírica. Suele cursar con tos perruna, afonía, ronquera, dolor de garganta, fiebre y, a veces, un ruido al coger el aire (estridor). Suele empeorar por la noche.»
La tos perruna es un tipo de tos seca muy característica, parece que la tos la produzca un perro o una foca. Se origina por la inflamación de la laringe, de la zona de las cuerdas vocales.
¿Qué se debe hacer en casa? Hay que evitar un ambiente seco poniendo depósitos de agua en los radiadores, así la humedad puede mejorar los síntomas, también es bueno mantener al niño en el baño con los grifos de agua caliente abiertos o respirando aire fresco de la calle. Si se produce un cuadro de fiebre hay que administrar el antitérmico recomendado por su pediatra. Es normal que el niño esté inapetente, no hay que forzarle a comer, pero sí ofrecer muchos líquidos. Es importante vigilar con frecuencia la respiración del niño ya que en ocasiones, la inflamación de la laringe dificulta la entrada de aire.
¿Cuándo tenemos que acudir a urgencias? Cuando el niño haga ruido al coger aire (estridor) aunque esté tranquilo; si la dificulatad respiratoria empeora: respira cada vez más deprisa, se le marcan las costillas, mueve mucho el abdomen, se hunde el pecho o estira el cuello, o cuando el niño tenga dificultades para tragar o babee mucho.
Además, hay que tener en cuenta que la mayoría de las laringitis son leves y benignas, no necesita tratamieno antibiótico, no se deben emplear collarines de agua y alcohol, no son efectivos y pueden irritar la piel. Tampoco hay que administrar jarabes ni supositorios para la tos sin consultar con el pediatra.
El medicamente que se administra es la Estilsona una vez al día, un corticoide con acciones antiinflamatorias (disminuye la inflamación) e inmunodepresora (disminuye la respuesta inmunitaria).
Si el pequeño presenta un cuadro de fiebre también se le puede administrar Ibuprofeno cada 6 u 8 horas, siempre bajo supervisión del pediatra.
El pequeño caballero tiene la suerte de contar con su Abu (ya lo sabéis) y en seguida vino a casa para quedarse con él. Han pasado la semana juntos, dando paseos por la mañana aprovechando el sol, ya que las tardes eran más duras, encontrándose peor e incluso con algunas décimas de fiebre. El apetito también ha disminuido, pero la recuperación en general ha sido bastante rápida. El jueves ya estaba en el parque correteando feliz.
Creo que lo mejor en estos casos de enfermedad y virus, es que los pequeños descansen en casa unos días, normalmente tosen bastante por la noche y no duermen ni descansan bien, si les levantamos para ir al cole o a la escuela van a estar agotados e irritables todo el día y, efectivamente, por las tardes tendrán que estar en casa por el cansancio y la subida de temperatura.
El pequeño caballero con tres días en casa ha cogido el fin de semana con fuerza y ha recueprado su apetito y su sueño habitual.
¡Espero haberos ayudado y solucionado algunas dudas con respecto a este virus!